Es el tiempo dentro del calendario litúrgico que nos invita a los espacios de silencio, reflexión y a prepararnos para la vivencia de la Pascua.
La imposición de la ceniza nos recuerda el rito de seguir creyendo y convertirnos al Evangelio. Por ese motivo, desde los primeros años de formación se consolida el conocimiento de la doctrina cristiana, basada en la oración, el ayuno y la limosna, lo cual fortalece la madurez de la fe y el compromiso por el más necesitado.
Las Mercedaria optan por seguir haciendo presente a Jesús como esperanza del mundo.
El miércoles, 14 de febrero de 2024, toda nuestra comunidad educativa lleva impregnada en su frente el símbolo que durante siglos invita la Iglesia.